
De orientaciones e identidades
Hoy vamos a hablar de dos conceptos que suelen confundirse con frecuencia: identidad y orientación.
Muchas veces se relaciona identidad con genitales. Y genitales con sexo, sexo con follar, follar con orientación… y es todo un cacao bastante guapo.
Por este cacao precisamente, a veces se presupone un sexo al ver unos genitales. En algunas ocasiones quien suponíamos que era un niño (porque tenía pene) resulta que es una niña (porque expresa que lo es). La transexualidad es un hecho de diversidad, en el que los genitales no corresponden con el sexo de la persona. No es una enfermedad ni un trastorno.
No decimos ni cuerpo equivocado, ni cambio de sexo, ni sentirse hombre o mujer… El sexo no cambia, cambia la expresión que la persona hace (muchas veces, después de años de tener una expresión impuesta socialmente). El cuerpo no está equivocado, es el suyo, que podrá gustar más o menos, ¡cómo nos pasa a todos! No te sientes hombre o mujer. Lo eres, te sabes hombre o mujer. Los sentimientos cambian; tu sexo, no. No intentes buscar por qué eres, simplemente lo eres. Lo eres porque el sexo no está en tus genitales, está en tu cerebro, igual que tu personalidad o tu manera de ser en otros aspectos.
Por otro lado, cuando hablamos de orientación no estamos hablando de la rama de la psicología educativa. Hablamos de orientación del deseo u orientación sexual.
La orientación es hacia qué nos sentimos atraídos, donde orientamos nuestro deseo, hacia donde va. Tu deseo puede orientarse hacia hombres, hacia mujeres, hacia ambos… Formando relaciones homosexuales, heterosexuales o bisexuales.
De esta manera, “las personas en situación de transexualidad, como hombres o mujeres que son pueden ser homosexuales, heterosexuales o bisexuales”[mfn]https://naizen.eus/wp-content/uploads/2019/01/GUIA_Gobierno-Vasco.pdf [/mfn]. Y como ves, no hago mención alguna a lo que tienen o dejan de tener entre las piernas, porque poco nos importa. Para esta explicación nos importa lo que SON, su identidad, y lo que les ATRAE, sus deseos.
Una cosa tienen la orientación y la identidad en común: no se eligen. Tu identidad es la que es, tu orientación es la que es. Son opciones diferentes, pero no puedes elegir ser hombre o mujer, ni que te atraigan unos, otros o los dos.
En definitiva, la única manera de saber la orientación y la identidad de alguien es preguntándoselo.
Bibliografía y enlaces de interés.
Terminología (Naizen Eus).
Ideas básicas (Naizen Eus).
Guía de atención integral a las personas en situación de transexualidad (Naizen Eus).